- Las neuropsicólogas María José García Rubio y Nancy Navarro se han desplazado a Zanzíbar como voluntarias NED para continuar con la evaluación psicológica de niños con hidrocefalia y espina bífida.
- Durante dos semanas han evaluado a 60 familias asociadas a la House of Hope, el centro sociosanitario apoyado por la fundación NED desde 2021. En total, 94 familias han sido evaluadas en lo que llevamos de año.
- Esta evaluación neuropsicológica permitirá diseñar un nuevo programa de apoyo individualizado para niños con hidrocefalia y espina bífida.
Durante las últimas dos semanas, la fundación ha continuado con el proyecto de evaluación psicológica y neurorehabilitación cognitiva en la House of Hope de Zanzíbar. Para ello se han desplazado a Zanzíbar dos voluntarias NED, la Dra. María José García Rubio, codirectora de la Cátedra VIU-NED y profesora de VIU (España) y la Dra. Nancy Navarro, profesora de la Universidad Santa Paula (Costa Rica).
En esta primera fase del proyecto, se está aplicando un protocolo de evaluación neuropsicológica en pacientes con hidrocefalia pediátrica adscritos a la House of Hope, el centro sociosanitario apoyado por la fundación desde 2021.
La dinámica de la evaluación consiste en dos partes diferenciadas. En la primera parte se realiza una entrevista semiestructurada para conocer los datos clínicos y sociodemográficos de los pacientes. Asimismo, se completan dos test más específicos. El primero evalúa los síntomas psicológicos asociados con la hidrocefalia pediátrica y el segundo recopila las percepciones de las madres y/o los padres sobre las perspectivas de futuro de sus hijos a medio y largo plazo.
En la segunda parte de la evaluación, se valora el estado cognitivo y sensoriomotor de los niños. En esta ocasión se ha contado con el apoyo de un médico rehabilitador, el Dr. Abdul (Hospital Mnazi Mmoja) y una terapeuta ocupacional, Zakia. Este trabajo en equipo ha permitido obtener una evaluación más integral del paciente neurológico.
Para finalizar las sesiones se emplean diferentes juegos y actividades lúdicas que permiten conocer otras esferas no tan estandarizadas por el protocolo como la interacción social y la empatía.
Estas misiones representan un primer acercamiento a la evaluación neuropsicológica del paciente con hidrocefalia pediátrica, un aspecto menos conocido de la enfermedad. 60 familias han sido evaluadas por nuestras voluntarias durante su estancia. En total, ya se han evaluado a 94 familias en lo que llevamos de 2023. Para continuar con las evaluaciones se desarrollará una nueva misión en agosto coordinada por la voluntaria Mar Piquer, psicóloga experimentada en el manejo de pacientes con daño cerebral.
Un objetivo principal de estas evaluaciones es establecer un plan de intervención individualizado para los pacientes con mayor potencial de mejora cognitiva. De esta forma, la fundación quiere ofrecer un apoyo más integral a los colectivos con los que trabaja y contribuir a la mejora de su desarrollo personal y bienestar.
